Aunque en este blog nos centramos principalmente en daños en rodamientos eléctricos, existen muchas otras fuentes de daño y modos de fallo para los rodamientos de motores. Si bien existen diversas guías y corrientes de pensamiento, nos centraremos en un conjunto de cinco fuentes de daño. El siguiente artículo es una adaptación de un artículo de SKF titulado “Las 5 causas más comunes de fallo de rodamientos en motores eléctricos y qué hacer al respecto”.
5 fuentes de daño en rodamientos en motores eléctricos
Sin ningún orden en particular, son:
Lubricación inadecuada y contaminación
Los rodamientos giran a alta velocidad y, sin una lubricación adecuada, se producirá contacto entre metales, lo que provocará desgaste, calentamiento y posible contaminación del lubricante. La primera medida preventiva es comprobar que el tipo, la cantidad y el intervalo de reengrase del lubricante sean los adecuados. Si hay contaminación, revise las juntas. En algunos casos, puede ser necesario un lubricante más viscoso. (Tenga en cuenta que el exceso de engrase también puede causar problemas).
Erosión eléctrica
Los lectores habituales de este blog no se sorprenderán de ver este en la lista. La corriente eléctrica, generalmente un efecto secundario del control del variador de frecuencia, pasa a través de los rodamientos. El resultado final es la formación de estrías en los rodamientos (imagen a la derecha) y su fallo. Esto se puede mitigar de varias maneras. Nuestro método preferido, el del blog AEGIS®, es instalar un anillo de puesta a tierra del eje AEGIS en motores de menos de 100 hp/75 kW y un anillo AEGIS y un rodamiento aislado o híbrido en el extremo opuesto. Otras opciones incluyen dos rodamientos aislados y un acoplamiento aislado para el equipo accionado, o un filtro senoidal capaz de convertir las ondas de corriente y tensión del variador en ondas senoidales. Estas soluciones son eficaces, pero más costosas que la puesta a tierra del eje.

Vibración
Los rodamientos del motor pueden dañarse por la vibración, tanto durante el transporte como durante el almacenamiento. Las vibraciones crean marcas en las pistas de rodadura, denominadas falsos brinelling (mostrado a la derecha; similar a un estriado). Esto se puede evitar durante el transporte bloqueando el eje axialmente con una pieza plana de acero doblada en forma de “U”, precargando el extremo opuesto a la transmisión y luego bloqueando radialmente el extremo de transmisión con una abrazadera. Para evitar daños por vibración durante el almacenamiento, gire el eje periódicamente para que el contacto vibratorio se distribuya por toda la superficie del rodamiento (en lugar de generar falsos brinelling).
Instalación y configuración incorrectas
Esto puede causar diversos tipos de daños. Errores comunes incluyen el uso de un martillo para acoplar el eje a la carga (lo que puede causar un efecto Brinelling), desalineación, desequilibrio, tensión excesiva de la correa y errores de montaje que causan sobrecarga. Para evitar estos errores, siga siempre los procedimientos de instalación recomendados y utilice instrumentos de calidad para determinar la alineación, la tensión, etc.

Carga insuficiente
Los rodamientos necesitan una carga mínima para funcionar correctamente. Una carga insuficiente puede ser tan dañina como una carga excesiva. Los daños causados por una carga insuficiente se manifiestan como manchas en los elementos rodantes y las pistas. Esto es especialmente importante en el caso de los rodamientos de rodillos cilíndricos, ya que están diseñados para cargas mayores. (Esto no aplica a los rodamientos precargados).
Cabe destacar que estos tipos de daño no son mutuamente excluyentes y pueden interactuar entre sí. Por ejemplo, una carga insuficiente puede acelerar la erosión eléctrica (al permitir que la tensión del eje aumente antes de que se produzca la descarga). La erosión eléctrica también contribuye a la contaminación del lubricante, ya que el arco eléctrico degrada químicamente la grasa y libera partículas metálicas microscópicas en el lubricante.